Día 28 - Aquí y ahora

Ayer en el grupo salió el tema e hicimos un ejercicio de autoinducción (algo así como autohipnotizarte). La idea era pensar en algo que quisiéramos poder lograr para “programarnos” a nivel sentidos. 

Yo elegí calmar mi ansiedad.

Más allá de cómo resulto la experiencia, me sorprendí con descubrir a que se debe mi ansiedad.

Cuando era pequeña, siempre deseaba estar viviendo la siguiente etapa: ir al secundario, empezar la facu, trabajar, estar de novia, casarme, tener hijos… Vivía mirando lo que estaba por venir.

Ayer alguien me dijo “La ansiedad es un apuro interno” y la definición me sonó en la boca del estomago reconociendo enseguida la sensación.

Comenté situaciones que me daban ansiedad y sobre todo en este proceso “Ya quiero haber bajado por lo menos la mitad de lo que tengo que bajar”. Escucharon atentos y otra voz me contesto con la misma certeza de la primera “No vivís el hoy, aquí y ahora. Te estás concentrando en el futuro y lo que te falta por alcanzarlo y no podes disfrutar del hoy”. 

Mierda! Años de terapia y nunca escuche algo tan exacto.

Me cuesta el ahora. Yo quiero el mañana que siempre será mejor, y en ese querer omito las experiencias el vivir con el aprendizaje adquirido, y por eso cometo los mismos errores.

En todos los dominios de mi vida he dejado que la ansiedad tome el control. Hay etapas que no las recuerdo, que son solo un recuerdo borroso, de los que no tengo detalles y nada que ver con los años, sino con la forma de vivirlo. Las cosas vividas aquí y ahora las tengo impresas en mi recuerdo; aquellas de las que quise salir, no.

Fue fuerte y un poco duro el descubrimiento, pero lleva a aprender algo más.

Es como dijo una de las chicas “Lo que aprendemos en el grupo lo trasladamos al resto de nuestra vida y como crecemos!”.

Me fui del grupo manejando en una lluvia torrencial. En otro momento hubiera estado nerviosa por ya estar en casa, por salir de ese diluvio, sin embargo lo tome con calma, prestando atención a los detalles, a mis sentidos que necesitaba agudizar.

Llegué a casa. El viaje se sintio como una de las lecciones mas grosas de la última semana.